FINGERS DE POLLO

 

 

Pechuga de pollo en tiras

Sal

Pimienta

Harina

Pimentón

Huevo

Vino blanco

Cereales corn flakes

Aceite

 

 

 

Cortamos las pechugas de pollo en tiras y las salpimentamos.

Mezclamos harina con un poquito de pimentón y pasamos las pechugas sacudiendo el exceso de harina.

A continuación batimos el huevo y le añadimos un poquito de vino blanco. Pasamos las pechugas por este huevo y por último las empanamos en corn flakes que habremos triturado un poco. Presionamos las tiras de pechugas en los cereales para que se Adhieran bien y las freímos en abundante aceite caliente. Una vez doradas por ambos lados las sacamos a un plato con papel absorbente y las servimos acompañadas de ensalada y mayonesa y ketchup.

 

 

 

 

 

 

 

 

GUISADO DE TERNERA

 

 

 

 Medio kilo de ternera de aguja o melosa en trozos

 sal

 harina

 aceite

 cebolla

 zanahoria

 2 dientes de ajo

 coñac

 laurel

 guisantes

 patatas

 starlux

 

 

 

 Salamos los trozos de aguja y los pasamos por harina. Ponemos aceite en una sartén y freímos los trozos hasta dorarlo. Reservamos y dejamos en la olla. Colamos el aceite y en él freímos una cebolla picada junto con los dos dientes de ajo a láminas, la hoja de laurel y 2 zanahorias en rodajas. Cuando esté todo frito añadimos media cucharada de harina y rehogamos. A continuación incorporamos una pastilla de starlux y una buena chorrada de coñac. Agregamos un vaso de agua o lo que convenga. Dejamos que empiece a hervir y vertemos el contenido en la olla. Ponemos la tapa y cuando empiece a salir vapor por la chimenea ponemos la válvula y esperamos a que suban las tres rayas. Bajamos el fuego al mínimo y contamos 30 minutos. Pasado ese tiempo retiramos la olla y esperamos que salga todo el vapor. Vertemos el guisado en una rustidera y agregamos guisantes y cuadraditos de patatas fritos.

 

 

 

     

 

                 

        

 

 

GUISO PERDIZ

 

 

 

 

 

 1 perdiz

 sal

 aceite

 harina

 laurel

 pimienta negra en grano

 ajos

 vino blanco

 

 

 

 Troceamos al gusto la perdiz y la salamos. En una cazuela ponemos aceite abundante y una cabeza entera de ajos, así como mucha cebolla troceada. Rehogamos e introducimos las perdices. Vertemos el vino blanco y añadimos agua. Salamos e incorporamos unas hojas de laurel y pimienta en grano. Dejaremos cocer 1 hora y media aprox.

La salsa la podemos pasar por la batidora.